Periplo por Añisclo


San Urbez-Sestrales-Pardina-Sercué-Viandico-San Urbez
 
1-2.Nov.07 Truncados los planes al Naranjo de Bulnes, improviso a última hora otra travesia solitaria para cerrar mi particular periplo otoñal por Ordesa.
Salgo de ZGZ directo a Añisclo, disfrutando la preciosa carretera del Desfiladero de las Cambras que transcurre paralela alvrio Bellós. De San Urbez, me encamino a los Sestrales, una ruta que tenia pendiente hacia muchos año y q no conocia. Muy guapa!! Aislada, fuera de los recorridos habituales, muy marcada recientemente, pero no descuidarse, no es una autopista. Tras ganar una enorme diagonal se pone a la vista de Bestué, alli opcion de bajar al pueblo, o volver por una faja de esas imposibles vista desde abajo y que nos trae de nuevo sobre el cañón. Tras la pedrera se alcanza la mítica brecha, guapo guapo, y en seguida se corona Sestrales Bajo y Alto por unos bellos prados y vistas a las Tres Serols. Descenso pausado hacia Plana Canal, elijo ir pegado a los cortados en vez de ir a buscar la pista al collado, y conecto con la pista poco antes de San Vicenda. Desisto por horario subir a la Suca, y me quedo con las ultimas luces tranquilamente al sol en el Refugio a dormir.
El viernes, salgo hacia el Cañón por la bajada de Foradiello, otro sendero imposible maravillosamente trazado y que en otoño ofrece unas vistas de escándalo, una auténtica gozada. Remonto por el barranco de Capradiza (sendero q conviene conocer para no perderse), paso por el Ref. Carduso, mas estropeado q hace unos años, pero en buen estado, y recorro el Cañón por la orilla opuesta por sus cornisas superiores, pasando por las Mallatas restauradas y muy cucas de M. Palazio y Mallata del Asesino? LLego así a la vertical del Cañón con la Ripareta y el Barranco de la Pardina. Por un paso de los "raros y desconcidos" tras un destrepe con cuidado, accedo a la Faja de la Pardina (Es posible tomar la Faja de la PArdina desde el Barranco de Capradiza, lo hice hace unos años, pero estaba muy túpido de vegetacion, poco andado, es aéreo, hay q cruzar bajo varias cascadas y pensé que igual habia algun tramo delicado con hielo, por lo que preferí ir por arriba).
La Faja de la Pardina merece sin duda la pena, lleva la marca de la casa Ordesa, aunque es mucho menos transitada. En esta ocasión estaba muy densa de vegetación, hace falta que vayan los del PArque a limpiarla un poco. aún asi muy bonita. Al final aparezco en Cuello Arenas, dudo si bajar a la Ripareta por el Barranco de la Pardina, sin sendero, y poco definido, he visto algo de nieve al final… lo descarto, y me bajo disparado hacia Nerín por las sendas que discurren paralelas a la Pista de las Cutas, de Nerín a Sercué. Flipo con las casas que se estan haciendo en este pueblo antaño deshabitado y que desde que abrieron una nueva pista de acceso para coches lo estan "arreglando". De Sercué, en vez de bajar por el Portillo al Cañón, o por un sendero de los raros que baja directo al Puente del Molino de Aso, me apunto una excentricidad, y me bajo a ver el bonito Puente de la Espucialla hacia el Barranco de Viandico. Allí entro al cauce seco del rio e inicio el descenso del barranco; algun destrepe, formaciones guapas, musgo,.. y un rapel de 6 metros, (ya lo conocía) destrepe algo delicado y superado el paso continuo, pronto se llega a la surgencia, de repente, el rio ya tiene agua, casi a la altura de una de las bocas de la Cueva del Moro, 20 metros arriba de la poza donde sale cuando vienes de la Cueva. Alli algun destrepe delicado para no mojarme los pies, y se coge la Faja de Viandico, otro sendero para el que lo conoce, no es evidente su inicio) y que permite ir paralelo al Barranco unos metros mas arriba con unas vista my guapas, finalmente en unas revueltas, salen al Puente del Molino de Aso, (donde sale la senda de acceso a la Cueva) y en unos minutos a San Urbez.
Vuelta muy maja, para repetir cualquier otoño, y retornar por el Barranco de la Pardina o por la Estiva y Mondoto. La excentricidad final fue un broche curioso, pero claro, uno que trabajo de guia de barrancos por allí… tenia ganas de recordar esos senderos en vias de extinción.
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